"SI LAS PIERNAS HICIERAN FALTA PARA TOREAR, EL TOREO, EN VEZ DE ARTE, SERIA UN DEPORTE, Y YO HUBIERA SIDO UN FRACASADO"
"Cuando yo veo a muchos aspirantes a héroes taurinos correr hacia el campo y les oigo decir ilusionados que van a "hacer piernas", se me viene a la mente la idea polémica de si el toreo es, en efecto, un ejercicio físico, o es, por encima de todas las cosas, un arte. Yo ya sé que todo deporte tiene un punto de arte y todo arte un puntito de deporte, pero el arte taurino no precisa, según yo lo veo y, lo que importa más, según lo veía Belmonte, del músculo, de la agilidad, ni de grandes facultades físicas para su más cumplida realización, pues que, por su condición de arte, se apoya más en las facultades del alma que en las del cuerpo. No a humo de pajas dice el cantar:
"El arte de los toros
bajó del cielo."
para cuyo descendimiento, las alas son lo necesario, no los pies.
Hay suertes y lances en el toreo, y después mencionaré algunos, que requieren cierta agilidad y ligereza, pero creo que un buen torero, y hablo de maestros, no ha menester de ellas para lidiar y despachar un toro con arreglo a normas del buen arte de torear.
De donde resulta que la falta de facultades físicas, no es causa bastante para evitar la gloria y la grandeza de un torero."
(Edmundo G. Acebal - Fiesta Española - 1966)