Bueno señores, de nuevo y acomodarse, porque ya empiezan las movidas para la realizaciòn de los tradicionales festejos taurinos a lo largo y ancho de todo el Perù; y las preguntas que nos haremos seràn siempre: Encontraremos suficiente ganado de lidia con la calidad y precio necesario para afrontar y mejorar nuestra fiesta brava nacional..?
Porque segùn lo visto y apreciado el año pasado, esperemos que no se repitan acontecimientos taurinos inolvidables por su mediocridad.
Porque segùn lo visto y apreciado el año pasado, esperemos que no se repitan acontecimientos taurinos inolvidables por su mediocridad.
Ojalà que este año continuemos realmente empeñados en el engrandecimiento de nuestra fiesta brava nacional, a pesar de nuestra corta pero efectiva cantera de matadores y novilleros nacionales que alternaràn con toreros extranjeros que ya estàn anunciando su pròxima temporada en los pueblos del Perù, y que en muchos casos son los mismos ïnvitados¨ de siempre, o sea que tampoco hay renovaciones o novedades en este sector, lo cual me recuerda a lo que dijera un conocido torero extranjero cuando volviò a su patria Ya no se puede torear en el Perù . . . . .hay muchos extranjeros!
Pero tambièn tomemos nota de lo siguiente:
GANADIROS DE PORA CASTA o LOS TUMBA LA FIESTA
Ha pasado toda una temporada màs de espectàculos taurinos a lo largo y ancho del Perù, sin embargo no se ha vista mejora en la presentaciòn de productos de las ganaderìas de toros de lidia, que hayan permitido que la oferta y la demanda hiciera llegar a los ruedos, ejemplares con los resultados màs optimistas que años anteriores; pero si se ha incrementado la cantidad de los llamados Ganadiros de Pora Casta o Los Tumba la Fiesta, que han saturado el mercado con ejemplares mediores y con los llamados deshechos de corral, que en estos casos son los que conforman su producciòn anual.
Lògicamente han habido honrosas excepciones, propiciadas por quienes son excrupulosos en la selecciòn previa de sus ejemplares considerados aptos para su lidia, con la finalidad de mantener el prestigio de una ganaderìa de toros de lidia que realiza, previamente, la selecciòn de sus reatas, hechuras y comportamiento a criterio del ganadero.
En el Perù, cuando se habla de ganaderìas de toros de lidia, inmediatamente se refieren a los años de la dictadura en que se diezmaron las ganaderìas de toros bravos existentes en aquellos tiempos, y se sigue rezando lo mismo, pero pocos han tomado la lanza, y han procurado el mejoramiento de lo que quedò, para luchar tambièn contra los Ganadiros de Pora Casta que sòlo sirven para Tumbar la Fiesta Brava Nacional.
Los libros sobre ganaderìas de toros de lidia lo dicen, que para ser ganadero de toros de lidia, hace falta el don, la vocaciòn y el sacrificio, porque criar reses bravas para un arte en vivo, como son las corridas de toros, es y serà siempre difìcil en extremo.
Es tiempo ya de hacer oìdos sordos a los Ganadiros de Pora Casta que siempre tocaràn las puertas de los seudoempresarios, mayordomos, donantes, comisiones, etc, de nuestros pueblos ofreciendo su producciòn de ganado mediocre, sin casta ni bravura, mucho menos nobleza, saturando el mercado nacional; y que en algunos casos los inspira a intentar la importaciòn de ganado extranjero como una soluciòn inmediata, sin darse cuenta que siguen en lo mismo, que el mal es endèmico en todas partes.
Pero tambièn tomemos nota de lo siguiente:
GANADIROS DE PORA CASTA o LOS TUMBA LA FIESTA
Ha pasado toda una temporada màs de espectàculos taurinos a lo largo y ancho del Perù, sin embargo no se ha vista mejora en la presentaciòn de productos de las ganaderìas de toros de lidia, que hayan permitido que la oferta y la demanda hiciera llegar a los ruedos, ejemplares con los resultados màs optimistas que años anteriores; pero si se ha incrementado la cantidad de los llamados Ganadiros de Pora Casta o Los Tumba la Fiesta, que han saturado el mercado con ejemplares mediores y con los llamados deshechos de corral, que en estos casos son los que conforman su producciòn anual.
Lògicamente han habido honrosas excepciones, propiciadas por quienes son excrupulosos en la selecciòn previa de sus ejemplares considerados aptos para su lidia, con la finalidad de mantener el prestigio de una ganaderìa de toros de lidia que realiza, previamente, la selecciòn de sus reatas, hechuras y comportamiento a criterio del ganadero.
En el Perù, cuando se habla de ganaderìas de toros de lidia, inmediatamente se refieren a los años de la dictadura en que se diezmaron las ganaderìas de toros bravos existentes en aquellos tiempos, y se sigue rezando lo mismo, pero pocos han tomado la lanza, y han procurado el mejoramiento de lo que quedò, para luchar tambièn contra los Ganadiros de Pora Casta que sòlo sirven para Tumbar la Fiesta Brava Nacional.
Los libros sobre ganaderìas de toros de lidia lo dicen, que para ser ganadero de toros de lidia, hace falta el don, la vocaciòn y el sacrificio, porque criar reses bravas para un arte en vivo, como son las corridas de toros, es y serà siempre difìcil en extremo.
Es tiempo ya de hacer oìdos sordos a los Ganadiros de Pora Casta que siempre tocaràn las puertas de los seudoempresarios, mayordomos, donantes, comisiones, etc, de nuestros pueblos ofreciendo su producciòn de ganado mediocre, sin casta ni bravura, mucho menos nobleza, saturando el mercado nacional; y que en algunos casos los inspira a intentar la importaciòn de ganado extranjero como una soluciòn inmediata, sin darse cuenta que siguen en lo mismo, que el mal es endèmico en todas partes.
Hacen bien los artistas que se ponen delante de los toros, negàndose a torear este tipo de ganado, porque es la ùnica forma de beneficiar a la fiesta brava nacional y a ellos mismos, combatiendo a los llamados Tumba la Fiesta o Ganadiros de Pora Casta que todos conocemos.
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